Corazón loco
Corazón Loco tenía todo para ser batacazo (una producción grande, actores conocidos, una premisa accesible, una torta de publicidad encima, etc), pero llegó la pandemia y la cuarentena y el estreno que iba a ser se postergó indefinidamente…y los inversores no quisieron/pudieron/supieron esperar mas. Y tal y como lo hizo buena parte del cine argentino, el estreno fue on-line, en plataformas via streaming. Claro está: una entrada de 30 mangos en Cinear.Play es una cosa…pero otra bien distinta es pretender recuperar algo de la inversión inicial. Por eso Netflix parecía ser el instrumento indicado para llevar la experiencia adelante. Al final de cuentas la plataforma de la N ha iniciado un proceso de degradación pronunciada que tiende a asimilar a las experiencias culturales empobrecidas de los países de consumo con los materiales que les ofrece.