Emergencia en el aire
Emergencia en el aire no está mal, pero tampoco es tan singular o siquiera tan entretenida como para justificar tamaño viaje. Siempre celebraremos que se estrenen películas de diferentes orígenes en las salas, incluso cuando se trata de un tanque periférico, pero al terminar de ver Emergencia en el aire no podía evitar la amarga sensación (tal vez errónea, desde ya) de que este tanque se esforzó demasiado por ser tanque, por llegar a un público internacional, por cubrir bases, apelar a sentimientos universales y tener un lustre que hizo que algo quedara en el camino.