No Esperes Demasiado Del Fin Del Mundo
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No esperes demasiado del fin del mundo

Veo comparaciones entre esta película y Triángulo de tristeza, por ejemplo, u otras de la misma liga. Es decir, piezas manifiestas del desprecio y la chapucería, de esas que cada tanto se imponen con prepotencia en el universo global del cine a fuerza de detalles de producción lujosos, actores caros e ideas ramplonas, que circulan con más facilidad y se degluten rápido, como sus imágenes y su arquitectura retórica. Pero mientras la película mencionada  era un rosario chillón de desgracia, iniquidad y estupidez programadas, con aderezo de menudencias fisiológicas y un dictamen soberano acerca de un horror que se exhibe con delectación mercantil (todo más viejo que los arrebatos de misantropía con la que buena parte del cine contemporáneo trama sus redes: según el malestar de la época, explotado hasta la náusea) esto de Radu Jude es definitivamente otra cosa.

Justified: Ciudad Salvaje
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Justified: Ciudad salvaje

El error del que hablo es que me equivoqué y empecé a ver la nueva Justified, es decir no  aquella de la que me hablaba Piro sino Justified: ciudad salvaje, que retoma al personaje doce años después: en otra ciudad, más cansado, con menos pulgas y con una hija adolescente. Reparada la distracción, puedo hablar de las dos series que considero una. Es cierto que en la continuación el personaje ha cambiado un poco, pero no creo que traicione tanto a aquel que supo ser.

Entrevista A José Luis Aparicio, Curador De La Iv Edición Del Festival De Cine Instar
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Entrevista a José Luis Aparicio, curador de la IV edición del Festival de cine INSTAR

Del 5 al 10 de diciembre, con la coordinación del cineasta Ricardo Figueredo, CADAL (Centro para la Apertura y Desarrollo de América Latina) presenta en la sala Manuel Antín del Centro Cultural San Martín de la ciudad de Buenos Aires el IV ciclo de cine del Instituto Hannah Arendt que dirige la reconocida artista cubana Tania Bruguera. La entrada es gratuita y las vacantes están limitadas a la capacidad de la sala. 

#38Mardelplataff – Diario De Festival: Cerrar Los Ojos, El Castillo, Vera Y El Placer De Los Demás, Music
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#38MarDelPlataFF – Diario de festival: Cerrar los ojos, El castillo, Vera y el placer de los demás, Music

La última de Erice no quiere decir nada porque está vez, al margen de las citas y referencias que se han desgranado sobre la película (perfectamente traídas a cuento muchas de ellas, por otro lado), quizá haya que olvidar todo y empezar de nuevo. Un nuevo Erice, que es la misma persona, pero es otro; o uno que recuerda vagamente quién fue. Uno que acaso se encuentre en alguna melodía perdida, alguna imagen, algún fotograma al azar. ¿Cómo se envejece? “Sin miedo y sin esperanza”, se dice en una escena.

Los Delincuentes
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Los delincuentes

Con una primera relación inevitable con Apenas un delincuente, la película de Hugo Fregonese del año 49, enseguida se aprecia que Moreno no está interesado en hacer de Los delincuentes una puesta a punto de aquella, sometida al oportuno rigor de los tiempos cenagosos que corren, ni ha pensado sus imágenes como réplicas fileteadas que remiten entre comillas a un “clásico” del cine argentino para asumir su devoción por él y dejar constancia en el mismo impulso, como al pasar, de la posibilidad de una contigüidad de prestigio entre una película y otra. 

Listen Up Philip 
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Listen Up Philip 

El cine independiente puede ser un veneno. La comillas se pueden ahorrar; que el lector las ponga donde le quede conveniente. Digámoslo así: las películas de Alex Ross Perry fermentan. Entre una película y la siguiente hace de las suyas un efecto que es menos de decantación, de reformulación, o de graduación de temas, angulaciones, procedimientos o herramientas que de enturbiamiento, cambio de estado. ¿Para mejor o para peor? ¿Se convierten en alimento o se pudren?

Eo
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EO

El cine se condice con el arte de la fuga. Menos que una exhibición de pedigrí -la alianza más o menos consensuada y escamoteada de EO con alguna causa célebre-, la errancia de Skolimowski hace que su película tenga razones propias, que tienen que ver con el corazón de Pascal, pero más, acaso, con el de una beligerancia respecto del cine realmente existente. Un animalito de Dios, un burro, que vive su felicidad austera de burro, pronto es maltratado, robado, abandonado, convertido en bestia de carga o en oprobioso sparring de muchachones sobrecargados de afanes de guerra.

Bafici 2023 – Recomendaciones Del Programador
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Bafici 2023 – Recomendaciones del programador

Un festival de cine debe presentarse como un enigma, un laberinto, un misterio cuya resolución está siempre en el futuro. El Bafici ha sabido concentrar la felicidad de la minucia, las imágenes secretas que se estremecen en los rincones de la programación; esas formas que bailan, que tienen modales e inclinaciones para las que no hemos sido preparados del todo. Eso fue siempre, o debió serlo, el Bafici, nuestro festival de cine preferido. El que nos depara placeres impensables, aun a costa de una opacidad que, en el fondo, no es otra cosa que una cierta densidad de carácter un poco aristocrática, que no está dispuesta a ceder ante los cantos de sirena de los nombres propios agobiantes, los que circulan con todas su prerrogativas por los festivales del mundo y fomentan la molicie de lo repetido, lo mustio, lo vetusto con otra denominación y un ropaje al que se le notan, si se lo mira bien, las fallas en la sisa.

La Semana Del Asesino
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La semana del asesino

¿Quién se acuerda hoy de Eloy de la Iglesia, luego de que otro director español de fama mundial llamado también de la Iglesia hiciera usufructo a efectos públicos y privados, para bien o mal, del apellido de marras? Probablemente casi nadie. Sin embargo, Eloy de la iglesia supo hacer algunas de las películas más raras del cine español, algunas de ellas enormemente exitosas. Se las arregló para sacar provecho de todos los resquicios de libertad que se le ofrecieron durante el período de la Transición; hizo cine “de explotación” con otro nombre.

Bafici 2022 – Diario De Festival: Tre Piani
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Bafici 2022 – Diario de Festival: Tre Piani

El balance de una vida es libre, dice lo que quiere, recuerda lo que quiere, funciona de cualquier manera. Pasa como con las palabras, que hay que tenerlas antes que el tema, el objeto, lo que se quiere decir. Lo que se tenga para decir es lo que quieran las palabras. Lo que hay para decir es lo que las palabras digan. Como en Tre piani, la última de Nanni Moretti.

Bafici 2022 – Diario De Festival : Restrospectiva Pascale Bodet
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Bafici 2022 – Diario de festival : Restrospectiva Pascale Bodet

Hace un par de años, a partir de una película que no viene al caso mencionar, tuve la idea un poco descarada de que no había reconciliación ya posible entre el cine francés y el humor. O mejor dicho, entre el cine francés actual y la comicidad. Mi impresión podía estar bien encaminada en líneas generales, pero demostró ser errada cuando se la confronta con la constelación misteriosa conformada por películas que apenas empiezan a ser captadas por el radar.

Tre Piani
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Tre piani

El balance de una vida es libre, dice lo que quiere, recuerda lo que quiere, funciona de cualquier manera. Pasa como con las palabras, que hay que tenerlas antes que el tema, el objeto, lo que se quiere decir. Lo que se tenga para decir es lo que quieran las palabras. Lo que hay para decir es lo que las palabras digan. Como en Tre piani, la última de Nanni Moretti. Vapuleada en Cannes, olvidada rápidamente, es la película de un viejo maestro que se ha puesto a temblar. No importa si Moretti fue alguna vez un maestro; la cuestión es que su película es el resultado de un hombre que parece que lo fuera.

Adelantos De Libros: La Dama De Las Colonias. El Cine De Claire Denis (I)
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Adelantos de libros: La dama de las colonias. El cine de Claire Denis (I)

¿Qué viene primero, Sangre Caníbal o Tindersticks? Es decir, la pregunta es entre esta película sobre un horror continuado, sin signos de agotamiento, una estela maldita cuya carga de malevolencia se extiende fatalmente sobre el presente y amenaza con destruirlo todo a su paso, o la banda sonora, la música sutilmente ominosa que acompaña con una obstinación marciana las imágenes. En todo caso, más que jugar al juego del huevo y la gallina, el espectador – émulo irredento del animal edénico, quizá algo espantado; no pocas veces hundido frente a la pantalla, acaso incluso con un hueco de congoja instalado en el pecho – está llamado a confundir dichosamente las cosas, a recordar el toque maestro de algunas escenas coronadas por la gracia musical con la que Denis y la banda de marras logran conjurar toda la belleza del mundo en instantes en los que la sombra de un destino funesto se cierne sobre los personajes sin saber dónde recae en realidad el peso de la escena.

Undine
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Undine

Un hombre concibe una historia de amor imposible, la más extraña jamás contada. Una vez más. El hombre pone en escena una mujer despechada y un hombre en falta. La mujer lo amenaza: si él se atreve a dejarla, ella le hará pagar con su vida (la de él). Si es el caso, el hombre pagará; ella se quedará sin nada, sin ese amor encarnizado en el que los cuerpos se escamotean, como monedas en la mano de un prestidigitador sin demasiada imaginación, pero el pacto en el que la vida del ser amado se intercambia por el amor que no ha terminado de consumarse será puesto en marcha en toda regla. El hombre, arrinconado, puesto en jaque, duda, difiere cuanto puede el momento de la verdad, se escapa.

Relámpago Sobre El Agua
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Relámpago sobre el agua

Se puede decir así: el director Nicholas Ray se está muriendo; el director Wim Wenders lo acompaña; los dos deciden hacer una película en la que Wenders es el realizador y Ray la estrella. Relámpago sobre el agua está contaminada por una película mítica, un fantasma de película que habita dentro suyo, la que Nicholas Ray había concebido unos años antes, en el principio de esa década del setenta tenebrosa. Esa película que parece todavía estar atrapada en aguas pantanosas, como una criatura herida, respirando con tranquila desesperación; más fascinante cuanto más inescrutable: We Can´t Go Home Again. Esa es quizá la razón por la cual Relámpago sobre el agua se convierte, probablemente a su pesar, en una de las mejores películas del director alemán: un proyecto de película, un work in progress que va un poco a tropezones, entre el desasosiego de la enfermedad que avanza y las facultades que menguan, entre la falta de rumbo discernible y la tentativa de llegar al final como sea.

The Exiles
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The Exiles

The Exiles es una película de voces perdidas, de rostros a la intemperie, de fantasmas que bailan. Es un documental del director inglés Kent MacKenzie que retrata un sábado a la noche cualquiera de principios de la década del sesenta, en la que los jóvenes indios que han dejado las reservaciones para vivir en la ciudad de Los Angeles salen a hacer el recorrido de bares, cines y boliches varios. Los personajes se mueven dentro de los límites de su propio mapa, un camino en medio del gentío y las luces chirriantes en el que se encuentran con sus pares.

Diario De Una Camarera
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Diario de una camarera

La novela de Octave Mirbeau en que se basa la película tuvo una versión cinematográfica más acreditada: la que Luis Buñuel filmó en 1964, casi veinte años después que Renoir, con Jeanne Moreau como actriz protagónica. Es una adaptación en la que el director español administra sus trucos geniales, sus señales de autor contra todo obstáculo, su respiración clínica, las modulaciones de su risa impía. La mirada de Renoir es más límpida, más condescendiente, menos severa. Sus criaturas habitan un reino extraño, algo mortuorio, pero no exento de la felicidad insensata de los juramentos de última hora que conforman la trama de todas las confabulaciones: ascender en la escala social es para Célestine motivo de orgullo, superación personal, imperativo categórico en el que se enjugan las lágrimas pasadas, aquellas que ya no caerán: no más amor, no más humillación, no más llanto.

Las Películas Me Hablan A Mí
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Las películas me hablan a mí

¿Qué veo en una película? ¿Qué es eso que me atrae, me fascina, me captura? Siempre es difícil esa parte. La instancia en la que las imágenes deben volverse un todo ordenado en la cabeza para poder ser explicadas; su placer trasmitido; su fuerza o su poder convertidos en argumento o en razón para los demás. Es la burocracia del crítico profesional, el trance un poco sombrío mediante el que un goce supremo, a veces inadmisible, se debilita sin remedio cuando hay que obligarlo por oficio a ser razonable, a que se justifique, a que comparezca ante el tribunal de faltas y se excuse, diga todo de sí y se defienda.

Malmkrog
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Malmkrog

El gestor más esmerado de la nueva ola rumana ha vuelto. A sus inflexibles encadenamientos de asuntos nimios y de estupefacción, esa retórica de oficina y caras desconcertadas, de cielos con ganas de llover, de teléfonos negros, de papelerío y de desgano escénico –toda esa acumulación de detalles desalentadores propios de burocracias avanzadas que se ha dado en llamar “procedimiento”, es decir el método Puiu de habitar el cine por medio de la estolidez sin nombre de escenas grises e inasibles que revelan, en el escándalo subterráneo de una cosmología menor, las huellas de un mundo que precisamente se resiste al corset de las leyes de los hombres-, el director le agrega ahora, en esta intrigante película llamada Malmkrog, los modos señoriales de una clase en riesgo de desaparición

#Postmardelplata2020 : En La Frontera
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#PostMarDelPlata2020 : En la frontera

José Celestino Campusano ha demostrado en la última década que su capacidad como cineasta está por lo menos a la altura de su voracidad. Cuando se piensa en una nueva película del director es inevitable que la fórmula sintáctica “la última de Campusano” acuda enseguida a la mente, como una declinación natural de la estatura que el director argentino ha logrado forjarse como autor. Se sabe que Campusano filma como si respirara; menos conducido por los arrebatos de una “inspiración” iluminadora – comodidad en todo caso sospechosa, de la que se echa mano para revestir el ejercicio artístico de una pátina nobiliaria, ajena a las modestas destrezas del oficio y su reguero de alegrías o sinsabores pedestres – que por una necesidad primaria: Campusano hace películas porque el cine y el mundo están ahí; porque las películas se encuentran en potencia; siempre por hacerse y siempre para hacerse.

Woodstock
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Woodstock

Esto se trata de Woodstock. Pero más que nada es sobre un animal parado arriba de un escenario con una remera amarilla; un pedazo pródigo de humanidad a punto de desbordarse al que no en vano apodan The Bear y que toca en Canned Heat, la banda de blues eléctrico cuya imagen se vio multiplicada por el mundo al salir en la película Woodstock (Michael Wadleigh, 1970). Ya se sabe que Woodstock es esa palabra olvidada y acaso un poco risible. Un concierto multitudinario de rock, una cosa bella y grandilocuente, y de paso también una película que una vez pasaron por la televisión cuando yo era chico y que se encarga de reflejar, en parte, el carácter anómalo del asunto que obligadamente se designa con el nombre de una localidad del estado de Nueva York. Es fácil reírse de Woodstock, porque la palabra parece ahora evocar una idea más bien arcaica, un talismán de amor custodiado por mentes que se quedaron ancladas en el calor de una juventud a la que largamente se añora; un sueño perdido construido con fragmentos, con voces pasadas, con el eco de emancipaciones truncas.

Algunas Ideas Sobre El Cine De Pascale Bodet
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Algunas ideas sobre el cine de Pascale Bodet

Hace un par de años, a partir de una película que no viene al caso mencionar, tuve la idea un poco descarada de que no había reconciliación ya posible entre el cine francés y el humor. O mejor dicho, entre el cine francés actual y la comicidad. Mi impresión podía estar bien encaminada en líneas generales, pero demostró ser errada cuando se la confronta con la constelación misteriosa conformada por películas que apenas empiezan a ser captadas por el radar. Extraordinarios artefactos cuya rara eficacia consiste en extender sus ondas de manera minuciosa, pacientemente, como si fueran breves destellos que no osan del todo, por ahora, asomarse a la superficie más que para dar cuenta con cautela de su existencia. Se trata de películas que respiran con discreción, que se mueven en una especie de limbo secreto iluminado menos por el peso de un nombre que por la convicción irreverente de que se existe en los propios términos, bailando con las luces bajas en un reino paralelo. Resulta que Pascale Bodet me demuestra que estaba equivocado. Pascale Bodet es uno de esos nombres, quizá el más convincente de todos en el panorama actual en el terreno de la comedia excéntrica, aquellos para los que el humor en el cine no significa un golpe de efecto lleno de astucia, que estalla, hace impacto en los sentidos y se pierde hasta ser reemplazado por el siguiente, sino un ritmo, una palpitación constante, que demora su aparición plena porque en realidad se ha extendido por cada plano hasta lograr habitarlo, menos como una necesidad que como una fatalidad.

El Diablo Entre Las Piernas
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El diablo entre las piernas

El diablo entre las piernas no deja de ser una película lúgubre, de una tristeza cósmica, pero que aparece animada por una energía rara; la energía de los cuerpos: los de los personajes que se niegan a simplemente dejarse estar, no respirar más y desaparecer. Para Ripstein y Paz Alicia Garciadiego la vida se sostiene y se justifica, acaso enteramente, mediante el impulso sexual. Para eso la pareja parece recurrir por momentos a una especie de gótico mexicano – ciertas señales, ciertos gestos, cierto clima de opresión -, con una casa- castillo en la que habitan los personajes y una actitud muy osada de beligerancia respecto de cómo se representan los viejos en el cine.

Dossier Obras Maestras Desconocidas/Secretas (Ii)
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Dossier Obras maestras desconocidas/secretas (II)

El dossier sobre obras maestras secretas/desconocidas tiene ese no sé qué de revelar algo oculto, algo prohibido, el gusto por el escondite, el encuentro con algo clandestino. Por eso se trata de un dossier íntimo y público a la vez, en el que jugamos a pensar listas de películas olvidadas, desconocidas o ningunearas al momento de su estreno y en la posteridad. Aquí les dejamos la segunda parte de este dossier. Esperamos que lo disfruten en su integridad.

Tommaso
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Tommaso

Sin que ningún gesto demasiado brusco lo hiciera prever, Ferrara se despacha con una película que tiene como centro inefable el mundo de la intimidad. En realidad era difícil pensar en el director haciendo algo semejante unos cuantos años atrás, cuando su cultivado malditismo indagaba más bien en el corazón de las calles peligrosas, en los rincones olvidados, en la belleza oscura de una ciudad que se hundía arrastrando todo lo que por ella reptaba, respiraba o se afanaba por salir a flote, a veces con visible resignación, siempre sin la menor queja. Pero desde hace no tanto tiempo, con un Willem Dafoe más obstinado que nunca en su máscara de náufrago impenitente, Ferrara parece haber encontrado otra veta para un mismo destilado de almas dolidas cuyo fin último quizá no sea otro que el de pegar arañazos en el aire y abrazar con el último aliento la posibilidad de una improbable redención.

Hombres De Piel Dura
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Hombres de piel dura

En la historia reciente de las “películas materiales”, Hombres de piel dura debería ocupar un lugar de privilegio. Uso la palabra materia para referirme a la evidencia física que refulge en ciertas escenas privilegiadas; el trazo indeleble que opera como testimonio directo del aspecto verdadero, palpable, de lo que está dentro del plano, y que no yace lánguidamente como un elemento decorativo del montón sino que es, de alguna manera, el corazón de la escena.

Cine Club Perro Blanco – Comunidad De Espectadores: Trouble Every Day
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Cine club Perro Blanco – Comunidad de espectadores: Trouble Every Day

La décima cuarta película que vimos y trabajamos fue una película notable, que tuvo, increíblemente, estreno local sin demasiada suerte. Por motivos que desconocemos la elección del título de estreno, Sangre Canibal, tampoco ayudó demasiado. Sea como fuere, su directora Claire Denis merece nuestro detenimiento en su rica obra. Y Trouble Every Day es una obra maestra que no podíamos dejar afuera.

Recomendaciones Pre Bafici 2019 (2): Desde La Cocina
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Recomendaciones Pre Bafici 2019 (2): Desde la cocina

Un festival de cine debe tener al menos un mérito: el mérito de lo desconocido, de lo inalcanzable, de lo intangible, de lo ininteligible, de lo inapresable. Se trata en verdad del mismo mérito; nombres diversos para un efecto de desasosiego que apunta en la misma dirección. Leer un gran festival como el Bafici significa tropezar con signos acaso imprevisibles, ripios gozosos que son en realidad el tesoro irremplazable del aficionado al cine; ese inveterado que capta imágenes esquivas, el que se mete en la sala con la convicción íntima de que eso que cree saber quizá sea, finalmente, un misterio, una cosa distinta de la esperada, un más allá de las expectativas, una entidad extraña, tantas veces dispuesta a saltar de la pantalla y abalanzarse sobre su conciencia para desengañarla, sumirla en la incertidumbre más absoluta, quitarle con violencia eso que creía que tenía, esos automatismos, esa comodidad.

Cine Club Perro Blanco – Comunidad De Espectadores: Silencio Se Enreda
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Cine club Perro Blanco – Comunidad de espectadores: Silencio se enreda

Silencio se enreda (que fue el nombre con el que se conoció a la original Noisses off ) retoma una plantilla de modales y vocabulario en apariencia perimidos para, de modo paradójico, dotar de vida el presente del cine de esos primeros años noventas en los que se filmó. La película redescubre con particular lucidez un lenguaje para ver cómo funciona en el cine contemporáneo, qué dice, de qué manera el clasicismo –aquello que no es lo clásico pero que alude a él – puede doblar la velocidad del cine actual, puede observar con precisión el cine clásico y apelar a algunos de sus mecanismos más obstinados para contaminar con ferocidad las imágenes del presente.

Fin del Contenido

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