Niños enfermos, escenarios aislados de todo contexto urbano, encuentro de dos mundos -uno de ellos fantástico y el otro real- y la construcción de un ideal familiar son, aparentemente, los diversos núcleos narrativos de Hiromasa Yonebayashi, director de El mundo secreto de Arriety y El recuerdo de Marnie. Hablamos de uno de los más jóvenes realizadores de Estudios Ghibli, que sin perder tiempo ha buscado despegarse de la sombra de...