Las películas como las de la saga John Wick suelen terminar sus días en los confines menos transitados de las plataformas, lo que hace apenas una década y algunos años era el mercado del directo-a-video. A esas tierras, y a los mares liberados por la piratería, había que dirigirse para encontrar una buena parte del cine de artes marciales, de los dramas asiáticos sobre killers acongojados, de las historias de...