El infiltrado del KKKlan
Una de las cosas más estimulantes de la película es la manera en que trafica libremente con diversos estereotipos y prejuicios raciales. Por supuesto, esto no es nuevo en Lee, pero en tiempos en los que la corrección política ya ganó todas la batallas, no deja de ser sorprendente. Sorprende también en el marco de una película que claramente se plantea como manifiesto en contra del racismo institucionalizado y violento, como panfleto anclado en el presente, político y puntual, tal como queda en claro con la inclusión final de los videos reales de actos de violencia racial de los últimos años y de las fuerzas políticas que los protegen.