La rebelión
La tendencia se ha consolidado en los últimos años, dando pie a un filón que evidencia un serio dilema político, por cuanto propone el derrocamiento del sistema establecido desde las propias plataformas del status. En consecuencia, habría que medir el impacto de tantos largometrajes apocalípticos que enfrentan al mundo y la globalización, tras el once de septiembre, para terminar afianzando el concepto democrático de la mayoría de los gobiernos y naciones del planeta.También estamos por sondear si semejantes propuestas del descontento cumplen un rol de servir de soma o placebo para las masas progres que claman por cambios de ruta y de régimen. Captive State explota el mercado de la contracultura como negocio, buscando comunicar sus mensajes alternativos en vías de domesticación.