Elementos

Por Marcos Ojea

Elemental
EE.UU., 2023, 103′
Dirigida por Peter Sohn.
Con voces de Mamoudou Athie, Leah Lewis, Ronnie del Carmen, Wendi McLendon-Covey, Catherine O’Hara, Joe Pera, Matthew Yang King y Jonathan Adams

Abrazar la luz

Hace un tiempo leí en Twitter algo como “las princesas de Disney ya no quieren un príncipe azul, quieren una disculpa de sus familias”. La reflexión aparecía después del estreno de Encanto, aunque también podía aplicarse a la mucho más lograda Red. El mensaje es claro, atento al clima de época: las protagonistas de las historias de Disney ya no esperan por su “y vivieron felices para siempre”, sino que buscan su propia identidad y autonomía, poniendo en crisis mandatos sociales y familiares. El amor romántico dejó de ser un fin en sí mismo, para convertirse en un componente más (a veces incluso ausente) en los cuentos de crecimiento y superación de la compañía del ratón. Ante esto, Elementos surge como la convivencia feliz entre dos miradas que hoy parecían irreconciliables. Por un lado, el relato de empoderamiento, del mundo y del deber familiar, y por el otro, la historia de amor hecha y derecha, esa que es más grande que la vida y que las voluntades individuales.
Una salvedad: hasta ahora hablamos solo de Disney, cuando en realidad deberíamos hablar de Pixar. Y si bien la última es propiedad de la primera, y a simple vista podría parecer que nos referimos a lo mismo, lo cierto es que Pixar siempre estuvo un poco más allá. De hecho, las princesas de Disney, enamoradas y dispuestas a cambiar de sirena a humana por un tipo, poco tienen que ver con lo que Pixar propuso históricamente. Si hacemos un repaso rápido, el romance más memorable en sus películas tal vez sea el de Up!, donde el amor entre Ellie y Carl funciona como un dispositivo para poner en marcha la acción. El caso de Elementos es, entonces, inédito: no sólo es una historia de amor, sino que, en su estructura y procedimientos, se trata de una auténtica comedia romántica. Es un movimiento que conecta con el pasado (para muchos cínicos, resentidos o “realistas”, la comedia romántica ya no es posible), y que habla de la inteligencia de Pixar para aunar la tradición con las necesidades del presente.

¿De qué se trata, entonces, Elementos? Ember, una chica de fuego, trabaja en la tienda que su padre abrió años atrás, cuando la familia llegó a Ciudad Elementos y se instaló en una zona periférica. Consciente del esfuerzo de su padre por mantenerlos, a Ember no se le ocurre otra opción para su vida más que hacerse cargo, eventualmente, de la tienda. Pero tiene un problema: cada vez que pierde la paciencia con algún cliente, explota y quema todo a su alrededor. En uno de esos arrebatos, conoce por accidente a Wade, un inspector (y un hombre de agua) que llegó hasta el negocio arrastrado por una tubería. Wade, un muchacho extremadamente sensible y carismático, pone en riesgo la estabilidad económica de la familia, pero también la estabilidad de Ember, que sin quererlo comienza a enamorarse de él.

Sí, ya sé: más allá de la novedad de un mundo habitado por versiones corpóreas de los cuatro elementos, todo lo que plantea la película dirigida por Peter Sohn ya se vio mil veces. A través de la estructura de comedia romántica que mencionamos, Elementos se hace cargo de estos lugares comunes y los utiliza como plataforma para desplegar sus preocupaciones. La inmigración, la cuestión racial, la diferencia de clases, el peso terrible de los padres e, incluso, lo desesperante que puede ser la atención al público. La película va tocando todos estos temas sin perder de vista ni la diversión ni a sus protagonistas, cuyo romance funciona porque habita (y habilita) los clichés de la romcom, una fórmula probada y capaz de emocionar siempre con los mismos recursos. Es probable que Elementos no sea recordada como una de las grandes películas de Pixar, y está bien, porque no lo es. Pero cumple de manera noble, y tiene unos planos finales que son puramente cinematográficos. De esos sobre los que hoy en día se dice que, definitivamente, son cine.

¿Te gustó lo que leíste? Ayudanos con un Cafecito.

Invitame un café en cafecito.app

Comparte este artículo

Otros ArtÍculos Recientes

Enterate de todo...

Recibí gratis todas las novedades en tu correo a través de nuestro Newsletter