Winter Boy

Por Amilcar Boetto

Le lycéen
Francia, 2022, 123′
Dirigida por Christophe Honoré
Con Paul Kircher, Juliette Binoche, Vincent Lacoste

Relax

En Une Femme Douce, Bresson narra el fracaso de un matrimonio desde el punto de vista de un  esposo que nunca pudo comprender a la mujer con la que se casó, y que ante su suicidio,  recapitula momentos de esa relación tratando de entender y rastrear su culpa en lo que sucedió,  así como lograr reconfigurar una imagen de esa mujer que significaba un misterio tan grande para  él. A través de una voz en off, leída casi sin intención pero escrita desde un profundo sentimiento  de pena y rabia (Me esperaba, por rabia, por odio hacia mí, para herirme. Se encontró con ese  joven del que no pude ni ver el rostro), la película converge su construcción visual con un relato  narrado, que muchas veces parece estar contradiciéndolo, o al menos poniéndolo en tensión.  Ese conflicto entre lo leído y lo escrito, entre lo dicho y lo imaginado, en definitiva, entre dos  formas distintas de expresión que se ponen en escena, vuelve a la película, no solo intrigante,  sino también más sincera, porque lo que se encuentra en ese recorrido parece ir tocando cada  vez más en profundidad a su personaje principal sin que este siquiera lo note. Todo gira en torno  a su punto de vista, pero su punto de vista no es enteramente lo que el cree, lo que el piensa que  expresa, muchas cosas las siente y las entiende, pero se le escapan, y en esa articulación es  donde Bresson encuentra algo interesante sobre el matrimonio, sobre el amor: en esos  sentimientos ocultos, que dan miedo decir, que no parecieran, incluso, poder decirse. 

Winter Boy es, según dicen, una película con fuente impronta autobiográfica del director,  Christophe Honoré. El director francés emplea un relato en off que gobierna, durante gran parte  del metraje, la articulación estructural de la película. Es decir, Honoré utiliza, al igual que Bresson,  la recapitulación de una voz over como justificación para una estructura fragmentada, que no  tiene problemas para eclipsar antes que las escenas terminen y que no tiene la necesidad de  explicar la llegada de los personajes a ciertas situaciones. Este estilo narrativo, pareciera a su  vez, relacionado con una forma fotográfica que pretende ser naturalista al desproveerse de una  iluminación cuidada, con flares sobre la cara de los personajes, un foco habitualmente desprolijo  y el constante uso de la cámara en mano.  

Contrariamente a la película de Bresson, Winter Boy todo el tiempo está pretendiendo dar la  sensación de ser una película relajada o ligera, sobre todo en cuanto a su forma, pero también  hay mucho de eso en la forma en que está narrada la voz over. Sin embargo, no resulta muy difícil  notar en esa intención, una pose. Y eso no sucede solamente porque bajo su apariencia de  fragmentación la película es totalmente convencional en cuanto a la estructura del relato, sino,  también y fundamentalmente, porque da la sensación constante de que la imagen está  subyugada por la palabra. Lo que quiero decir con esto, es que no pareciera existir tensión  alguna, como ejemplifique más arriba con la película de Bresson, entre la imagen y la palabra.  Más bien, pareciera que la imagen viene a confirmar lo que la palabra expresó, pero con menos  gracia y con cierta falta de tacto.  

No quiero decir, con esto, simplemente y como enseñan los profesores de guión en su primer  clase, que la voz over no debe decir lo que se va a ver, porque la película de Bresson muchas  veces lo hace y en esa diferencia entre las intenciones de la voz y de la imagen radica gran parte  de su gracia. El problema es que el personaje de Honoré pareciera ya haber entendido todo,  parece no ir a buscar nada al pasado, porque el pasado no pareciera tener nada para darle. La  falta de tensión entre la imagen y la palabra expone una falta de peligro que la película, por más  que intente con alguna imagen escandalosa de un intento de suicidio o de un acto de pedoflia, no  puede superar: todo está tan digerido que hasta esos momentos de tensión parecen calculados.

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